Profesora VILMA SALCEDO.
GRADOS 11ºJ. M.

“En una institución educativa de Soacha, había cinco niñas llamadas solidaridad, honestidad, tolerancia, respeto y justicia. Ellas eran muy juiciosas y llevaban once años juntas, pero se pelearon porque llegó envidia y quizo dañar su relación amistosa, duraron tres meses peladas, llegado el día de la graduación todas se sentían muy tristes por que no podían estar juntas, después de ese día pasaron cinco años y ellas todavía se recordaban mucho, hasta que fortuitamente llegaron a la casa de un amigo, en ese momento se miraron a los ojos y corrieron y se abrazaron y reconocieron a una amiga llamada Paz, quien le mostró como estaba luchando por los derechos humanos de su país y ellas e unieron a ella para reforzar la misión de alcanzar un mundo más justo” ( Pérez, Mónica y otros).
LA PAZ NO DEBE SER UNA EXPRESIÓN DE DESEOS, SINO UNA FORMA DE VIDA.
“Si cada mujer, hombre niño y niña, no comprende la importancia que la paz tiene para el conjunto de la humanidad, no habrá ninguna ley que pueda asegurarla: por que la paz no la recibimos como un regalo, hay que ganarla. La paz es el triunfo de la vida, no se puede construir sobre la destrucción y la muerte”. (Medina, Tatiana y otros).
“La latente violación de los derechos humanos es la principal característica del conflicto colombiano.Tanto así que se ve reflejada en campañas políticas que se promueven con falsas promesas y no con programas de gobierno coherentes, y que al final no son más que propagandas populistas que a la larga nos inclinan más por una guerra declarada.
No existen intentos claros para negociar este conflicto armado, por lo cual éste ha fracasado, debido la impunidad que permite un círculo vicioso. Además sumémosle a esto la falta de iniciativas de la sociedad civil, para promover el derecho a la paz”. ( Hurtado, Jegaraldín y Otros.)
Cuento: Paz natural.
“En un bosque habitado por variedades de animales, en un vecindario cerca del rió vivían una ardilla, una familia de pájaros, un sapo, un búho y un pato.
Una noche, la familia de los pájaros festejaba el cumpeaño de la abuela, mientras que los demás animales dormían; por la celebración el ruido de la música y de los mismos pájaros era insoportable.
Minutos después, todos estaban tirados en el suelo, golpeados y agotados, por lo cual el búho convocó a una junta al día siguiente.
Ya en la junta el búho, hizo firmar a todos los animales un tratado de paz, en el cual se comprometieron a respetar el espacio y las normas de convivencia. ”
( Hurtado, Jegaraldín y Otros.)